Mensaje del Editor



Un horizonte de transformaciones: el inicio del camino para la Revista de Educación Superior del Sur Global


La Revista de Educación Superior del Sur Global inicia con este número de Julio de 2016 su camino, un camino que tendrá su próximo mojón en Diciembre de este año, cuando confirmaremos nuestra vocación a incorporarnos a diversas bases de datos, regionales e internacionales, tales como Latindex, Scielo, Scopus y otras.


Somos conscientes de que la decisión de sumarnos al circuito de producción editorial no es irrelevante. Somos conscientes de que los esfuerzos desplegados en el campo son ya bastante numerosos y que probablemente, haya llegado la hora de pensar en la sinergia, la convergencia y el despliegue de esfuerzos de carácter federalizante.

La lógica de fragmentación de los esfuerzos que despliegan instituciones, programas de docencia y de investigación y de revistas por ellos sostenidas, se encuentra ligada a los incentivos de autorización, reconocimiento y acreditación de los programas y a otros estímulos de este tipo.


El riesgo de esa explosión framgentaria de revistas, sujetas a la lógica de la evaluación académica en contextos nacionales y locales, es que la producción de conocimento pertinente, situado, valioso, creativo, original y potente -y en esa medida, internacional y global- se desdibuje y olvide, en pos de la racionalidad instrumental de la categorización en función de los criterios ad hoc propuestos por las bases de datos y por los circuitos internacionales de evaluación de la ciencia, circuitos altamente concentrados, que padecen notablemente de una afección monopolista.


Así como la estructura política y económica internacional tiende a reestructurarse en función de la lógica de dominación de las áreas centrales -y con este señalamiento no pretendemos sugerir algún tipo de causalidad o lógica reduccionista de vinculación de ambos fenómenos- también la academica parece estructurarse y reestructurarse en función de los criterios elaborados y propuestos por algunas pocas empresas de organización y difusión de la actividad científica.


El peso de esta estructura de organización, visibilidad, y reconocimiento científico ha dado lugar a una compartible categoría, la de “culturas evaluativas alteradas” (Beigel, 2015)1.


Al decir de esta autora:


las jerarquías actuales del Sistema Académico Mundial son el resultado de un proceso de acumulación originaria que fue separando áreas geográficas, lenguas y disciplinas más dotadas, respecto de espacios, lenguas y disciplinas cada vez más carentes de recursos materiales y de capital académico”.


Osvaldo Barsky2 ha mostrado con claridad la lógica constructiva de los rankings en educación superior y la misma comunidad académica ha dado muestras de impaciencia respecto de la hegemonía del factor de impacto, como criterio de ordenación del valor de la producción académica (tal como lo expresan la Declaración de San Francisco o el Manifiesto de Leiden3)


No pretendemos pues ser originales en la identificación o en el planteamiento del problema. Sin embargo, de lo que se trataría es de construir un horizonte alternativo a esta realidad. Y allí es donde las estructuras académicas del Sur Global, tienden a ser no unívocas y por momentos ambiguas.


En efecto, las políticas de educación superior, ciencia y tecnología de las grandes potencias académicas emergentes, lejos de rechazar la lógica de la globalización hegemónica, y de la crítica de los fundamentos de los rankings, promueven nuevos programas orientados a la presencia en ellos, a la construcción de “universidades de clase mundial”, de centros y campus de excelencia, de formación de recursos humanos en las instituciones academicas del core mundial y a potenciar a algunas instituciones nacionales que pueden competir por un lugar en los rankings globales y nacionales.


Hay al menos dos aspectos relevantes a identificar en la racionalidad de estas políticas.


Un primer argumento, al que podríamos denominar globalista, supone el reconocimiento de la unidad del sistema global de ciencia, tecnología e innovación.


La presencia académica de los países emergentes y de sus lenguas en las bases de datos y en los circuitos centrales, la legitimidad de sus universidades en los mismos instrumentos que tienden a reproducir la centralidad de las universidades norteamericanas e inglesas, parecería fundamentarse en la necesidad de rechazar los atajos, los caminos auto-complacientes, el diseño de instrumentos que, con base en una especie de reclamo identitario “nos den bien”, nos ubiquen en el lugar deseado, sin la indispensable inversión en la interfase Educación Superior - Sistema CTI.


Un segundo argumento, el de la comunicabilidad, tiene que ver con el reconocimiento de la amplísima difusión del idioma inglés como lingua franca de la academia, como espacio común de la producción científica y tecnológica mundial.

Varios países del Sur Global poseen el inglés como una o la principal lengua de la herencia colonial, como puede ser el caso de India, o Sudáfrica o de los antiguos enclaves occidentales en Asia, como Hong Kong y otros. En términos generales, las áreas descolonizadas poseen muchas veces como común denominador local de la variedad lingüística y dialectal nacional al idioma nacional de la antigua metrópoli, sea este el inglés, el francés, el portugués, el alemán, u otros. Sería imposible la comunicación, incluso en clave descolonial y de cooperación en el Sur Global, sin el reconocimiento del ampliamente legítimo empleo del inglés.


Ello no supone que la producción académica de alto nivel en otras lenguas autóctonas no deba ser reconocida, preservada y difundida. En especial, esto plantea desafíos múltiples a las lenguas que en el siglo XXI compartirán con el inglés una amplia comunidad de hablantes, como el chino mandarín y el español, y también a las comunidades lingüísticas a las que el desarrollo histórico ha terminado asignando un rol secundario -y probablemente declinante.

Adicionalmente, nos plantea el desafío de reconocer y rescatar, ya no solo los saberes orales y el conocimiento y las tecnologías apropiadas de las áreas rurales, remotas, o de menor desarrollo relativo, sino incluso la producción académica y científica contemporánea que se cumple por practicantes en esos contextos.


En suma, reconociendo el problema de la periferialidad científica, el de la necesaria crítica al paradigma hegemónico de valoración de la ciencia en base a la pura preeminencia de los indicadores bibliométricos, somos conscientes de la complejidad del proceso de construcción del y de los campos científicos.


La solución no pasa por la ligera invitación a no publicar en inglés o en revistas indexadas, y sí por la asunción de la complejidad de la realidad, y por el desarrollo de políticas de educación superior, ciencia, tecnología e innovación críticas y creativas, que permitan rebalancear las perspectivas y criterios propios de las ya mencionadas “culturas evaluativas alteradas”.4


En el caso uruguayo y en nuestro modesto contexto doméstico, podríamos invocar una justificación adicional. el hecho de que la pequeña y emergente comunidad académica de investigadores del campo de las políticas comparadas de educación superior, o los de la comunidad de investigadores de educación comparada e internacional, no poseen hoy ninguna herramienta específica de vehiculización de su contribución.


La Revista de Educación Superior del Sur Global, tal como lo expresábamos en el Mensaje del Editor del número 0 se propone no ser ajeno a estos desafíos. Como lo decíamos entonces:


Una respuesta breve podria ser que enfrentamos, desde el Sur Global, desafíos que no refieren solo al Sur sino a la estructura global.

Que nuestro lema no es ya ´publish or perish´ sino ´to think or to perish´, o al modo de Simón Rodriguez: ´reinvent or perish´”


Nos proponemos por ello no encerrarnos en nuestro propio funcionamiento como revista académica, sino contribuir a redes y culturas académicas iberoamericanas y globales que identifiquen este problema y que se propongan alternativas teóricas y prácticas académicas diversas, conectadas, críticas, capaces de superar el paradigma hegemónico, el imperio del factor de impacto, la fragmentación de los espacios de producción, conexión, comunicabilidad, crítica y desarrollo del conocimiento en educación superor, ciencia, tecnología y sociedad.


Por ello también integramos la recientemente creada Asociación Uruguaya de Revistas Académicas -AURA-5 y nos proponemos expandir esa lógica de colegialidad de la crítica a otras revistas hermanas enfocadas en la educación superior, comparada e internacional.


La Revista presenta un conjunto de aportes originales de investigadores de la región.


En la Sección II, Artículos, se presentan tres aportes, provenientes de académicas de México y de Brasil, Zaira Navarrete-Cazales, Cláudia Battestin, Fernanda Furini, Raqueline Rigo y Rosa Martha Romo Beltrán, que abordan temas como la identidad y la formación profesional en los docentes, la educación inclusiva y las políticas de educación especial, y la trasmisión familiar de significados en familias de académicos en el exilio -en el que hemos conservado el punto de vista subjetivo, típico de la implicación de la investigadora en el método de la historia de vida.


En la Sección III, Informe Especial, se presenta un iluminador trabajo de Marcela Mollis, sobre la educación universitaria en el ciclo político de los gobiernos de los presidentes Kirchner, en Argentina.


En la Sección IV. Notas de Investigación, se da paso a la contribución de Adélcio Machado dos Santos, Alexandre Carvalho Acosta y Liz Barbara Borghetti.

En la sección V se presentan sendas reseñas de libros de nuestros colegas de la Sociedad Mexicana de Educación Comparada -SOMEC-Zaira Navarrete-Cazales, Z. y Marco Aurelio Navarro-Leal, (2014 y 2015) debidos a Miriam Paola De la Cruz y Catalina Olga Maya Alfaro.


En la Sección VI. Entrevistas y Creación Universitaria, tenemos la satisfacción de publicar la Conferencia pronunciada por Augusto Pérez Lindo en la Lectio Inauguralis 2016 del Instituto Universitario Sudamericano, IUSUR: La idea de una Universidad Sudamericana para el Desarrollo Inteligente y Solidario.


En la Sección VII, Celebración, compartimos una imagen del artista plástico y profesor titular de la Escuela Nacional de Bellas Artes (UdelaR) Daniel Tomassini, que forma parte de su muestra "Schwarzwald" (Selva Negra).

1 Beigel, Fernanda (2015) “Culturas Evaluativas Alteradas”. En: Política Universitaria. Buenos Aires: IEC-CONADU. ISSN: 2362 2911

2 Barsky, Osvaldo (2014) La evaluación de la calidad académica en debate Volumen I. Los rankings internacionales de las universidades y el rol de las revistas científicas. Buenos Aires: Editorial UAI-Teseo, 2014. (Colección UAI Investigación).

ISBN: 978-987-723-018-5

3 http://www.ingenio.upv.es/es/manifiesto#.V46k07jhAdU

4Vessuri, H. (1995). Recent strategies for adding value to scientific journals in Latin America. Scientometrics, 34(1), 139-161.

5www.aura.edu.uy


Rev. educ. super. sur glob - RESUR Nº1 ene - jul. 2016. 1-4 ISSN 2393-6789 4